Enredos.

Siempre me han estresado la vida los caguines. No siempre he estado exenta de ellos, también he esparcido un par de chismes, inocentemente, sin intención de causar daño. Pero cuando ya me estoy viendo envuelta en ellos, siendo yo la desafortunada persona de la que hablan, no me gusta para nada. Más si son enredos en los que se involucran gente tan importante y tan cercanas a mi. Ouch. Cuesta tanto esto de vivir totalmente en paz. ¿Por qué tiene que ser todo así con obstáculos? O sea, una personilla dijo por allí "Nadie dijo que sería fácil" y lo comprendo de inicio a fin. Comprendo, que cada cosa que se va poniendo en nuestro camino, tanto buenos o malos, son por algo. Y vaya que he comprobado eso. Cada vez, encuentro más cierto, el dicho que las cosas fáciles a la larga aburren, porque todo se da así de una manera tan simple y que como nunca te esfuerzas, te da igual si lo pierdes.
Eso es lo que nos sucede ahora, o sea, me explico. Llegó el amor a nosotros, no sé si amor amor, no sé bien como llamarlo, pues ustedes entenderán. Salimos. Salimos en secreto, al menos eso es lo que yo quiero, me gusta empezar con el misterio. No que ya todo el mundo lo sepa, lo aceepte y que vivamos la vida. Me gusta que sea todo secreto y luego comenzar a destapar la caja de pandoras. Por qué, se preguntarán. Sucede que era mi mejor amigo, (de un modo, puedo decir que aún lo es). La cosa es que tengo ciertas sospechas con mi mejor amiga, estoy segura que se pueden haber gustado, nunca eso llegó a algo. Pero si es así, no quiero ir y decr, "Hola, salgo con él" y que quizá su amistad o la nuestra se acabe, huuum es tan complejo.
Sólo quiero ser feliz. ¿Por qué no me permiten serlo, de una manera simplecita?
Entiendo las complejidades de la vida, comprendo que todas estas cosas me ayudarán a crecer. Y sí, asumo, si  quiero ser mejor persona. ya no sé como terminar esta entrada, para que suene bonito, ahora sólo sé que estoy complicada
 y ya no quiero más enredos en mi vida.